Esta noche va a ser larga. Tengo la mesa literalmente llena de apuntes y me pregunto dónde voy a comer. Bueno, antes pienso qué voy a comer. Bah, es igual. El caso es que tengo varios temas por delante, el examen es el viernes, tengo una ligerísima idea de la asignatura y me río al pensar en los temas ya estudiados. Gracias a Dios, no sabes cuáles son, así que no puedes preguntarme nada. Pienso en la situación, y se me escapa una sonrisa.
Ahora mismo estoy pensando "¿qué darán en la tele esta noche?". Siempre encuentro algo con lo que perder el tiempo. Sí, soy un verdadero especialista. Tengo motivación fácil y, llegados a este punto, diría que hasta pocas exigencias: cualquier cosa medio interesante puede servir. Sólo algún programa o serie que logre esbozarme una ligera sonrisa o un casi inapreciable fruncimiento de ceño. Algo para tener la mente en blanco, para no pensar en nada más.
Hoy han venido unas amigas y, en broma, he dicho "yo hago descansos de descansar para estudiar un rato". Me he reído al decirlo, pero no podía ser más verdad. Estudio cinco minutos por cada media hora que me paso sin hacer nada, en el mejor de los casos. Qué le voy a hacer, siempre he dicho que las personas no cambian, quizá lo has leído alguna vez por aquí. No voy a dar mal ejemplo yo. Al final del día, todo consiste en encontrar alguna excusa o alguna futura promesa para justificar que no has hecho nada. Un "hoy daban mi programa favorito" (?) o "mañana me despierto antes y lo hago" e incluso algún "hoy era día de descansar". Conforme avanzan las horas, esas excusas que tan mal te sonaban se te hacen más apetecibles, a medida que tus ojos también van entonando un 'basta ya', como de canción protesta. A ver qué excusa me pongo hoy... ¿Alguna idea?
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