Escuchar la brisa, los insectos, los pájaros. Notar el sol de mediodía entrar por la ventana, iluminando la habitación. Saber que no tienes nada que hacer, sólo descansar, mirar por la ventana y ver cómo la vida se detiene por unos instantes mientras la gente come y la calle se queda desierta. Hipnotizarse por el suave movimiento de las hojas de los árboles, moviéndose al son de la fina brisa de un día sin nubes. Ver como, efectivamente, la tranquilidad existe. Y está en estos pequeños momentos impagables, casi inapreciables. Inspiradores.
Tranquilitat:
ResponderEliminarQuan la teva ment vaga per un lloc que no és d'aquest món i les hores passen i passen ... i passen. Quan t'oblides fins i tot de respirar, els teus ulls veuen però no observen, la teva oïda sent però no escolta i el teu cervell funciona però no processa.